Dice una discípula del genio que asoma hoy en este ateneo: "Ernest Artal, quienes lo hemos disfrutado como profesor, como director y como compositor sabemos también lo grande que es como persona". Algo tiene el agua cuando la bendicen. Yo lo he disfrutado como amigo, ¡qué buenos momentos he pasado con el maestro!
Espero contar en alguna ocasión a los lectores de este blog la historia de su Pater Noster, una obra cumbre a la que un día se le hará verdadera justicia. Ya vendrá...
La Trilogía Sacra de Ernest Artal es un bálsamo que alcanza su mayor efecto tonificante al llegar al milagro final del Pater Noster, pieza musical que obliga hasta al más agnóstico a mirar hacia arriba.
Ramón Alfil
Cadena de lecturas y espacios